Poseer una impresora 3D tiene un coste de adquisición importante, independientemente del usuario: un particular, una industria o incluso el sector de la educación, por ejemplo. El objetivo es rentabilizar esta inversión o, al menos, perpetuarla. Proteger el suministro eléctrico se convierte en algo esencial y el INFOSEC SAI SYSTEM TM proporciona toda la seguridad necesaria para imprimir con tranquilidad.
¿Cuáles son las mejores prácticas para asegurar su impresión 3D?
Controlar y optimizar su impresión 3D con un SAI
El SAI es una solución eficaz para asegurar el suministro eléctrico. Evitará cualquier riesgo de parada inesperada durante la impresión 3D y ganará en eficiencia.
Mientras que una impresora 3D puede ser accesible para un particular a partir de 200 euros sin IVA, en un entorno profesional los precios suben hasta alcanzar las 6 cifras.
Asegure su protección eléctrica
El interés de estas configuraciones es poder imprimir sin limitaciones: cortes de corriente, daños en una pieza, problemas durante la impresión... Basta con una variación de la corriente, una subida de tensión o, peor aún, un corte de corriente, para que la impresión se estropee. Los cortes de energía son relativamente cortos, de 10 segundos a unos pocos minutos. Esta interrupción es crítica para una impresora 3D porque está en juego todo el proceso de impresión.
Un tiempo de impresión importante
La impresión en una impresora 3D requiere un tiempo más o menos importante en función del material utilizado y del proyecto deseado. En efecto, utilizando como material el plástico estándar (ABS), nos encontramos con un tiempo de impresión de algunas horas en las piezas pequeñas o, para las piezas más complejas, de 3 a 5 días laborables de media.
Este tiempo puede ampliarse cuando haya que pegar o pintar las piezas impresas. Los materiales más robustos (PC, nylon, fibra de carbono) requieren tiempos de impresión de 6 a 7 días laborables, y una media de 12 días laborables para la impresión de metal. Para las impresiones de gran volumen, este tiempo se estima en semanas. Este tiempo demuestra la necesidad de estar continuamente abastecido y protegido durante su impresión.
No interrumpa su impresión en 3D con un SAI
Gane en eficiencia
Tu trabajo merece toda tu atención y la impresión en 3D requiere tiempo. Elija un SAI para garantizar la eficacia de su trabajo: protegerá sus equipos de posibles subidas de tensión, fallos eléctricos o cortes repentinos de energía. Supongamos que se produce un corte de luz por mal tiempo, el SAI tomará la alimentación de la batería sin interrumpir el servicio, con una autonomía estimada de 60 minutos (puede cambiar según el modelo y la carga conectada). Esto es una gran ventaja durante la impresión en 3D, que requiere un suministro de energía continuo durante varias horas sin ninguna interrupción. Cada segundo es precioso en el desarrollo de su pieza: en caso de fallo de alimentación, tendría que volver a empezar.
Reciba alertas en tiempo real con su SAI
Además de proteger una impresora 3D, un SAI también puede conectarse a la red mediante herramientas de comunicación. Los SAI de nuestra gama Line Interactive están todos equipados con un puerto de comunicación en el que se puede insertar: una tarjeta SNMP, una tarjeta de contacto seco AS400 (más información aquí). ¿Estás lanzando un proyecto de impresión 3D y tienes que irte? Esté informado en caso de fallo de alimentación u otro error de suministro eléctrico en tiempo real en caso de que su SAI haya tenido que tomar el relevo de la red eléctrica.
Proteja su trabajo
Puedes comprobar el estado de tu impresión y de tu contador eléctrico para reiniciar tu energía correctamente. También puedes cerrar tus aplicaciones a distancia y apagar el ordenador. De este modo, se evitan los cortes de energía repentinos que dañan los componentes electrónicos.
¿Cómo elegir un inversor para su impresora 3D?
Descubra nuestra guía de selección para elegir la solución que corresponde a sus necesidades.
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